La historia de la COPAT – Capítulo 2

El sector tabacalero organizado sufría en la década del noventa, aún más el impacto de las políticas neoliberales por la ausencia del estado en las regulaciones del mercado que quedaban en manos de las fuerzas privadas que en virtud de la envergadura de las dos grandes firmas que operaban en el país, manejaban a gusto y paladar al sector. Un setenta por ciento de los productores medianos y pequeños quedaban fuera de la estructura comercial dominada por los gigantes Massalin Particulares y Standard Commercial Tobacco, quienes oficiaban como únicas bocas de acopio, monopolizando la producción de los productores locales.
Probablemente todos los productores acudían a estas bocas de acopio, pero menos del cincuenta por ciento de la producción quedaba marginada de la comercialización.
Fue entonces que los productores comenzaron a tomar nota y darse cuenta que era necesario volver a fortalecer la cooperativa. Luego del 2001 con un estado nacional quebrado y sumido en la peor de sus crisis sociales, políticas y económicas, los productores tabacalero comenzaron a trazar un plan de acción de propuestas y demandas a los gobiernos de Eduardo Duhalde y posteriormente de Néstor Kirchner y a la dirigencia política local en pos de recomponer la malla productiva y reavivar al sector, que a pesar de la quiebra no había liquidado su capital mayor en manos de las empresas internacionales que no hacían otra cosa que menoscabar la producción y las economías locales.
La dirigencia tabacalera de esos años comenzó a trabajar junto al entonces senador José Alperovich, enfocados en la recuperación de las economías y sistemas productivos agrícolas regionales, era urgente acceder a recursos económicos a través del Fondo Especial del Tabaco para comprar la quiebra del sector y que la producción vuelva a manos de los productores locales.
Alrededor de 2500 productores activos fueron aportando la parte mínima que le correspondía para lograr los recursos económicos y levantar la quiebra. El objetivo era claro: tener la mejor oferta, comprar la quiebra de la cooperativa y volver a generar el espacio cooperativo que tanto beneficio traía a todo el sector tabacalero y por último que las instalaciones de la cooperativa no quedaran en manos privadas
Fueron muchos los dirigentes que trabajaron denodadamente a la par del gobierno provincial con el gobernador Miranda a la cabeza en ese momento, tratando de conseguir los recursos de nación para recuperar la cooperativa.
Una vez conseguido el objetivo de la recuperación de la cooperativa, la tarea por delante fue enorme, hubo que poner en marcha las maquinarias que estaban paradas y en muchos casos obsoletas o con serios problemas mecánicos. En paralelo y ya en el año 2002 se iniciaron las tareas de acopio del tabaco. Durante el gobierno del presidente Néstor Kirchner a nivel nacional, las políticas y programas trazados en pos de recuperar al sector, se inyectaron fuertes sumas de dinero para poner la planta industrial en marcha, a procesar tabaco y rearmar el círculo virtuoso de la producción seguida de la industrialización de la hoja de tabaco y concluir con la exportación de la materia procesada en origen, controlando no solo la calidad sino que los excedentes sean cada vez menos dañinos.
La COPAT reiniciaba su marcha de recuperación propiciando el beneficio para todo el sector tabacalero luego de una década, donde la convertibilidad asfixió a los productores al borde de la extinción. Una década donde los precios eran manejados por privados sin la intervención del estado y siempre en beneficio de ellos mismos y de manera poco pública. Donde la demanda no era evidente. Tras la puesta en marcha de todo el sistema industrial, vino la consecuente búsqueda de mercados externos para los tabacos que anteriormente eran excedentes. El sector productivo tabacalero necesitaba poner sus tabacos arriba de los barcos y ganar nuevos mercados en el mundo. Fueron los años 2004, 2005, 2006 y 2007 los testigos de este trabajo. Con su recuperación, la cooperativa impulsó una competencia mucho más sana al resto de los acopios existentes en Tucumán y en el país, recordemos que también eran las mismas empresas que estaban acopiando en Tucumán. De esa manera, la competencia hacía que todos los actores que compraban tabaco debían competir por un producto único, como ser el tabaco verde tucumano.
La tarea mancomunada de productores tabacaleros de los departamentos de Alberdi, La Cocha y Graneros y del norte Catamarca, (el departamento Santa Rosa) que siempre estuvieron activos y a la espera de un mínimo de demanda para volver a poner sus hectáreas en función del cultivo de tabaco.
En la década que va del 2003 al 2013, la producción tabacalera volvió a niveles de crecimiento constante con la COPAT marcando en cierto modo el rumbo de la economía del tabaco en la provincia, exportando incluso a veces hasta el treinta por ciento de su producción y llegando a picos históricos del cincuenta por ciento de tabaco procesado.
Hoy, el trabajo de nuestra cooperativa representa al 55% por ciento del mercado local, con un crecimiento sostenido y afirmado en una base de ocho millones de kilogramos, recordemos que allá por el año 2010, la producción había descendido a tan solo tres millones de kilogramos de tabaco de producción.
Hoy la COPAT es una organización cooperativa moderna y enfocada en sostener y ampliar la producción de tabaco en Tucumán con un volumen permanente en sus instalaciones, sin deudas y con la capacidad de procesar la materia prima de los productores locales, posicionándose como una competencia seria para los sectores privados nacionales y multinacionales que participan en el negocio del tabaco en el país. Desde 2011, 2012 nuestra cooperativa llegó a tener diez países a quienes les exporta nuestros tabacos, entre ellos Filipinas, Rusia, Bulgaria, Bélgica, Paraguay, Indonesia y otros a los que fuimos llegando con nuestra materia prima y desde el pasado 2019, nuestros tabacos ingresaron al esquivo mercado de los Estados Unidos.
Otro dato importante es el hecho de que a partir del 2011 en adelante, nuestros tabacos tenían nombre propio en el mundo; Burley origen Tucumán. Esto dato tiene un valor incalculable para la producción tabacalera, toda vez que si nuestro producto es aceptado por las manufacturas, Tucumán se posiciona como una región de Argentina donde se produce burley de alta calidad, procesado y exportado a través de nuestra cooperativa.
Desde el 2012 al 2020 se mantuvieron de forma permanente las inversiones de modernización de nuestra planta. Se hizo la ampliación de la planta de proceso, se adquirió una planta más de origen brasilera y en el difícil contexto mundial por la pandemia, en este 2020 importamos una prensa comas origen italiana de alta calidad y avanzada tecnología. Todas estas inversiones empoderan fuertemente a la COPAT frente a la demanda internacional, porque son inversiones de bienes de capital que van dirigidos a que nuestra cooperativa produzca un bien terminado de altísima calidad.
En materia de infraestructura también desde el 2011 en adelante se hicieron obras como el canal que abastece de agua, prácticamente a 13 mil hectáreas de tabaco; el canal Sauce Yako. A la reconstrucción de este canala que sestaba en estado ruinoso se la hizo en un tiempo récord de 25 días y se frenó la pérdida de efluentes vitales para el riego en la zona de La Invernada.
Esta obra y otras del mismo tipo como el revestimiento de canales riego presurizado (que otorgan mayor eficiencia a la poca agua que existía en el dique Los Pizarros), fueron llevadas a cabo a través de la COPAT y el Gobierno de la provincia de Tucumán, quien desde desde el 2002 y a la fecha entendió el valor que la producción tabacalera suma a la economía de la provincia y asumió su rol impulsor de las obras que son sumamente necesarias para para el sector. Además durante los dos últimos años se proyectó y concretó un centro de curado de tabaco Virginia, con 40 estufas trabajando de forma permanente en la cooperativa y estamos fomentando y desarrollando una superficie de alrededor de 90 hectáreas de esta variedad para ampliar nuestra cartera de productos. El total de la producción de Virginia se exporta y la cooperativa no tiene stock de ese tipo de tabaco.
La Subsecretaría de Agricultura de la Secretaría de desarrollo Productivo y la División Tabaco, son quienes nos acompañaron en esta historia de crecimiento y en quienes nos respaldamos pues sus gestiones nos marcan el ritmo de crecimiento y nos asisten y controlan en relación a los recursos que la Ley 19800 nos otorga. Del sector tabacalero tucumano viven en tres departamentos; Juan Bautista Alberdi, La Cocha, Graneros, Río Chico y el departamento de Santa Rosa del norte de Catamarca. Actualmente estamos en un número no menor a 400.000 habitantes de esas regiones que benefician sus economías de manera directa e indirecta a través de la producción del tabaco. Todos los recursos económico que genera el tabaco se reinvierten y en estos cuatro departamentos de las dos provincias. Hoy estamos cerrando el año 2020 con una producción diversificada de aproximadamente ocho millones de kilogramos. Se producen tabacos criollos, variedad Virginia, (que es exportado en su totalidad con éxito) y nuestro caballito de batalla; el tabaco Burley, que está en franco crecimiento en la cantidad de hectáreas sembradas.
Tucumán y el norte de Catamarca, cuenta hoy con aproximadamente 1500 productores activos en la actividad y la COPAT nuclea a dentro de su instalaciones y su proyecto agroindustrial exportador.
Esperamos para los próximos años continuar en la franca línea de crecimiento de nuestra cooperativa, porque de su éxito automáticamente se desprenden el de todo el minifundio tabacalero tucumano de manera equitativa y sustentable.